Tras encadenar varias temporadas decepcionantes en la Euroliga, el inicio de curso de Olimpia Milano en la competición europea no tiene visos de que esta campaña vaya a ser mucho mejor que las anteriores. Una predicción algo arriesgada con tan solo cuatro jornadas disputadas, pero que se desprende de las pobres sensaciones que ha transmitido el equipo de Ettore Messina, que tras cuatro partidos, ocupa la penúltima posición en la tabla clasificatoria con un único triunfo.
Olimpia Milano ha cerrado la semana con dos tropiezos dolorosos. El primero, la contundente derrota a manos de Olympiacos por más de 20 puntos de diferencia (89-68) que dejaron de manifiesto que los italianos están lejos de uno de los favoritos para alzarse con la Euroliga. Y el segundo, el más doloroso, sonrojante, e incluso ridículo, tras caer ante Zalgiris Kaunas por 82-85.
Una remontada ‘imposible’
El desenlace del partido rozó el surrealismo, con una remontada prácticamente imposible de los lituanos. A falta de 14 minutos para acabar el encuentro, Olimpia Milano vencía por 27 puntos de diferencia (62-35), completando una gran actuación defensiva, tal y como atesora el bajo tanteo de los de Andrea Trinchieri. Pero desde ese momento, y hasta el final del encuentro, parcial favorable de 20-50 favorable a Zalgiris que les permitieron llevarse la victoria de vuelta a Kaunas. Una ‘salvajada’, la media centena de puntos encajada por los de Messina en menos de 15 minutos.
Uno de los protagonistas que vivió en primera persona la histórica remontada de los lituanos fue un Nikola Mirotic que, de nuevo, volvió a ser el mejor de Olimpia Milano firmando dobles figuras (17 puntos y 11 rebotes) a las que sumó tres asistencias, un robo y 27 créditos de valoración en algo más de 31 minutos. Tras un fallo del exazulgrana Leandro Bolmaro en el tiro libre, el hispano-montenegrino tuvo en sus manos el rebote que hubiese puesto a su equipo por delante, pero el balón se le escurrió de sus manos, confirmándose así el ‘desastre’ para el conjunto italiano.