The ‘unfortunate’ Real Madrid hits rock bottom at home and is already preparing signings
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Tras haber encontrado cierta estabilidad con cuatro victorias en casa, el Real Madrid de baloncesto volvió a agudizar su crisis a domicilio, tras sumar la sexta derrota a domicilio en seis partidos. La última, ante Maccabi Tel Aviv, en un partido que se volvió a escapar tras un pésimo último cuarto (24-14), y que regalaron, ya que a falta de 100 segundos, vencían por seis puntos de diferencia (72-78).
El inicio de temporada para el equipo que dirige Chus Mateo no está siendo nada sencillo, con una enfermería ocupada desde hace varias semanas por Andrés Feliz, que se recupera de una rotura en la fascia plantar de su pie derecho, y de un Usman Garuba que arrastra problemas físicos desde inicio de curso, y que todavía se perderá algunos encuentros.
Más bajas inesperadas
En la visita a Belgrado, para enfrentarse al ‘exiliado’ Maccabi, el entrenador madridista tuvo un par más de bajas: Dzanan Musa se resintió de unas molestias de tobillo que arrastra desde el partido ACB ante Bàsquet Girona, mientras que Serge Ibaka, con vómitos horas antes del encuentro, tampoco pudo estar a disposición. Cuatro ausencias para una primera plantilla integrada por 13 fichas y que, de nuevo, volvió a disparar la minutada en algunos jugadores: Edy Tavares jugó 33 minutos y 49 segundos, Gabriel Deck 30 minutos y 33 segundos, Mario Hezonja 32 minutos y 32 segundos, y Facundo Campazzo que también rozó la media hora de juego.
Las desgracias vienen en forma de lesiones y también en canastas. Poco se puede decir de la gran defensa hecha por Deck a Saben Lee, que ejecutó a los blancos prácticamente sobre la bocina para colocar en el marcador el 79-78 definitivo. Fue el máximo anotador del cuadro israelí, con 19 puntos, bien acompañado por el exazulgrana Rokas Jokubaitis, autor de 17 tantos y siete asistencias.