Con tan solo 15 años, Thiago Splitter llegó a la cantera del Baskonia procedente del Ipiranga y, tras sendas cesiones en el Araga Gorago y en el Surne Bilbao Basket, regresó en 2003 al Buesa Arena para convertirse en un ídolo para la exigente afición vitoriana (le retiraron la camiseta el pasado mes de abril).
En múltiples ocasiones, el brasileño de 2,11 metros que aunaba calidad, potencia e inteligencia en la toma de decisiones se cruzó en el camino del Barça de Xavi Pascual, con dos finales de la Liga Endesa marcadas en rojo, la de 2008 y la de 2010.
Splitter era un maestro con el medio gancho y sabía aprovechar a la perfección su físico para castigar desde la media distancia o jugar por encima del aro, recordando en cierto modo a las prestaciones de un ilustre exazulgrana como el griego Efthimios Rentzias.
Antes, en 2006, el Barça de Dusko Ivanovic cayó con estrépito en las semifinales de la Supercopa por 76-52 frente a un Baskonia en el que Splitter anotó 16 puntos y volvió locos al italiano Marconato, al gallego Fran Vázquez y al croata Mario Kasun.
La final de la Liga Endesa 2007-08 tampoco tuvo color y se saldó con una derrota por la vía rápida del equipo que dirigía Xavi Pascual, llegado en febrero para ocupar el cargo del destituido Ivanovic. Los azulgranas perdieron en el Palau por 64-75 con 21 puntos de Splitter, por 74-78 con nueve rebotes del brasileño y por 76-61 en Vitoria. ¡3-0!
Meses después llegó otra derrota en las ‘semis’ de la Supercopa por 73-70, pero el Barça de Xavi Pascual pareció romper su ‘gafe’ con Splitter y con el Baskonia en la final liguera 2008-2009 con una victoria por 1-3 en una final que encumbró a Juan Carlos Navarro y al turco Ersan Ilyasova (80-82 y 75-67 en Vitoria, y 85-67 y 90-77 en el Palau).
Sin embargo, aún faltaba otra sonora derrota ante el brasileño en la final de la Liga Endesa 2009-10, otro 3-0 en contra. El sudamericano asaltó el Palau en el primer partido con 16 puntos (58-63) en un pésimo último cuarto azulgrana (10-18), atrapó seis rebotes en un segundo partido de infarto en el Buesa Arena (69-70) y aportó 13 rebotes y cuatro asistencias en el tercero (79-78 con prórroga).
Ese verano, Thiago Splitter se marchó a la NBA e hizo historia en 2014 al conquistar el ‘anillo’ con los Spurs del mítico Gregg Popovich (acaba de sufrir un derrame cerebral) y de los Ginobili, Tim Duncan y Tony Parker. El interior colgó las zapatillas en 2017 y dos años después empezó su carrera en los banquillos como ayudante de los Nets.
Cuatro años después se integró en el cuerpo técnico de los Rockets y el pasado verano se decidió a aceptar la oferta del Paris Basketball para debutar como primer entrenador. Apenas han pasado tres meses y su equipo es una de las sensaciones de la Euroliga (seis victorias y tres derrotas) con TJ Shorts como referente. Este viernes visitan el Palau.