Hay que hacer un ejercicio de memoria para recordar la última vez que el Avilés contó con todos sus futbolistas antes de saltar al terreno de juego. Desde la tercera jornada ante el Llanera, cuando Santamaría tuvo que ser sustituido al descanso por un problema en los isquiotibiales que lo ha dejado en el dique seco hasta ahora, los problemas de lesiones han sido una constante en el equipo. Al gijonés se le unió, unos días después, la baja de Mecerreyes, que ya está de vuelta tras superar su tumor testicular, y las lesiones de Viti, recuperado de una fisura en la costilla, y de Gete, cuya ficha se ha utilizado para inscribir a Edu Cortina, cuya rodilla no le ha permitido ejercitarse con el equipo esta semana. Con el delantero y el defensa leonés de vuelta, más el regreso del centrocampista avilesino, los blanquiazules planean asaltar uno de los campos más complicados de la categoría, Pasarón, ante uno de los gallos del grupo, un Pontevedra que apunta a terminar el año en los puestos de arriba.
Con Mecerreyes ya disponible y totalmente en forma, Rozada ya puede respirar con tranquilidad. Durante estas últimas jornadas el ovetense tan solo ha tenido a dos jugadores que se puedan desenvolver en la posición de pivote, Kevin Bautista y Josín, central reconvertido, por lo que el regreso del avilesino le permite tener plan B en caso de que surja algún imprevisto. Algo parecido estaba pasando con la delantera. El entrenador del Avilés está apostando por la dupla Natalio-Javi Cueto y, aunque tiene a Bashiru como opción desde el banquillo, parece que el técnico no acaba de confiar en el ariete. Por ello, el regreso de Santamaría, una de las mejores noticias durante la pretemporada, supone un soplo de aire fresco para un equipo que suma dos encuentros consecutivos sin ver puerta.
Por último, la vuelta de Viti le permite a Rozada volver a utilizar el sistema en el que más cómodo se ha visto a este Avilés. El leonés es mucho más seguro a nivel defensivo que Osky, algo que se pone más en valor cuando cogen al contragolpe a los blanquiazules, ya que el lateral se queda formando una línea de tres atrás. Osky es un jugador de un perfil más ofensivo, por lo que, en comparación, le cuesta más realizar esas vigilancias defensivas. Con estas tres piezas Rozada confía en volver a la senda de la victoria y que, sobre todo, no se repita lo vivido en la última salida del Avilés, cuando cayeron derrotados ante el Valladolid B.
Horario del Langreo-Avilés. Ya hay horario para uno de los grandes derbis del fútbol asturiano. El primer Langreo-Avilés de esta temporada se disputará el próximo sábado 16 de noviembre a las 18.00 horas en el Nuevo Ganzábal.
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